Corre, corre...

La Guardia Civil ha detenido en la estación invernal de Candanchú (Huesca) a un vecino de Pamplona de 40 años que se dio a la fuga tras intentar robar en un vehículo oficial del equipo de esquí del Instituto Armado. Para acceder al coche, había roto una ventanilla lateral, pero fue sorprendido con las manos en la masa cuando los componentes del equipo de esquí de la Guardia Civil volvían de su entrenamiento. Al listo no se le ocurrió otra cosa que salir corriendo. Y es que hay que ser gilipollas para ponerse a correr delante de un equipo de atletas del benemérito cuerpo. Claro, al grito de "¡Alto a la Guardia Civil!" lo trincaron en cero coma segundos. Ay, hay cada listo por ahí... Pero como siempre me repite un veterano muy veterano, reflexión: no te fíes nunca. Cuando aparques el patrulla, al loro.